Ignazio Abate se llevó un fuerte golpe en su ojo izquierdo y, aunque el hematoma está desapareciendo, se está absorbiendo bien, no parece probable que esté recuperado antes de que acabe la temporada.
Las buenas noticias es que no peligra ni su ojo, ni parece que vaya a perder visión. Está todavía pendiente de evolución, pero el Milan no es optimista.