Los aficionados del Legia que acudieron a Madrid provocaron graves disturbios en la capital antes del encuentro de Champions ante el Real Madrid. Los aledaños del Santiago Bernabéu se convirtieron en una zona de pelea.
Los ultras del conjunto polaco emitieron un comunicado sobre el hecho: "Los aficionados del Legia de Varsovia expresamos nuestro asombro ante lo que se ha dicho. Se vio un caos organizativo causado por la policía y otros servicios de seguridad".
Además, en la nota incluyen el ataque que recibieron sus aficionados: "El comportamiento de la policía fue muy agresivo, provocador. Se nos dieron golpes con palos y nos amenazaron con perros sin bozal".
Por último, también recalcaron la actitud de los seguidores en la grada: "El número de incidentes fue muy pequeño. El comportamiento de nuestros aficionados en las gradas fue perfecto".