Pero, pese a la situación, no dejarán de animar a su equipo en uno de los duelos más importantes de la historia del club. El Madrid visita Varsovia y se afronta como un hecho histórico.
De ahí que se hayan preparado pantallas gigantes junto al estadio para seguir todo lo que suceda en el duelo ante los de Zidane. Como si de un partido cotidiano, el líder de los ultras polacos, conocido como Staruch, guiará los cánticos de una hinchada que arropará a su equipo desde fuera.
El dispositivo policial, tras los incidentes ocurridos en el encuentro del Bernabéu, será el mismo de siempre. Como si el estadio fuera a llenarse, pero con los aficionados polacos animando desde fuera.
Una situación cuanto menos curiosa que viene agravada por el malestar de varios de los radicales que se desplazaron a Madrid hace semanas. Mientras las imágenes hablaban de ultras descontrolados y muy agresivos, entre estos existe la sensación de que fue la policía española la que se excedió a la hora de contener a los hinchas del Legia.
Sea como fuere, dentro del propio Real Madrid no se ha organizado un dispositivo de seguridad distinto al de cualquier desplazamiento. El equipo, que llegará a la capital polaca pasada las 12.30 horas para alojarse en el hotel Bristol, afronta este encuentro con normalidad, sin darle mayor importancia a lo acaecido en la capital de España.