Tras la derrota en París por 4-0, Luis Enrique dio una vuelta a su esquema y pasó del 4-3-3 al 3-4-3, protegiendo más a Busquets y a Rakitic en el centro del campo.
Además, Messi conectaba mucho mejor con el equipo y Sergi Roberto ayudaba mejor en las mayor parte de las tareas del equipo. Y los últimos encuentros lo han demostrado.
Sin embargo, Jordi Alba y Lucas Digne sí que han pasado a un segundo plano. El catalán no jugó de inicio en la remontada ante el PSG, mientras que con el Deportivo sufrió bastante.
Asimismo, la situación del futbolista es mucho peor: no ha jugado ni un minuto en los últimos encuentro del equipo.