El 'Clásico' del fondo de armario se lo volvió a llevar el Real Madrid. Los blancos encontraron soluciones en su banquillo mientras el Barcelona acabó prácticamente con los mismos 11 que empezaron.
Un único cambio, André Gomes por Alcácer, que no se hubiera dado si Neymar hubiera estado en el terreno de juego. ¿Hubiera acabado entonces Luis Enrique con el once inicial sobre el terreno de juego?
Ante los contratiempos del choque, Zidane siempre tuvo a lo que recurrir. Se lesionó Bale y entró Marco Asensio, pero también pudo hacerlo Isco. En la segunda mitad, con Casemiro al borde de una segunda amarilla letal, el técnico francés pudo retirar al brasileño para dar entrada a Kovacic.
La expulsión de Ramos provocó un último cambio, de James por Benzema, pero a Zidane aún le quedó la bala no gastada de Morata.
Enfrente, Luis Enrique únicamente dio minutos al portugués André Gomes, una constante durante esta temporada. Tampoco tenía mucho más al lado. Unos Javier Mascherano y Arda Turan recién recuperados, un Denis Suárez venido a menos, un Digne que prácticamente no cuenta y un Aleñá que marcará el futuro pero aún está verde.
El 'Clásico' de los tres puntos se lo llevó el Barcelona, pero el del fondo de armario, importante para el futuro, lo ganó el Madrid con facilidad.