Esta mañana se anunció su traspaso al United, lo que ha dejado al Chelsea con las ganas de ver de vuelta al belga.
Se marchó siendo poco más que un niño devorado por las inseguridades sembradas en él por Mourinho, y podía volver hecho un goleador, pero el belga ha preferido reencontrarse con el luso a volver a Stamford Bridge.
El Chelsea ha activado el 'plan B', encontrar otro delantero centro en el mercado capaz de reemplazar a Diego Costa. Y no se aprecia ninguno a la vista. ¿Quizá Álvaro Morata?
La falta de alternativas puede llevar a Antonio Conte a recular, y reconciliarse con el hispanobrasileño, lo que frustraría los planes del Atlético de Madrid de raíz.