El Alavés consiguió una importante victoria este fin de semana ante el Celta y lo más positivo para Asier Garitano es ver cómo muchos de sus jugadores comienzan a sentirse cómodos.
Esto se aplica sobre todo a los incoporados durante el mercado estival. Oliver Burke y Lisandro Magallán han aterrizado en tierras vascas con ganas de hacerse un hueco.
La lesión de Ely ha sido un rayo de esperanza para el cedido por el Ajax, que aprovechó su titularidad ante el conjunto gallego para reivindicarse y anotar un tanto que le dio vida al Alavés.
Magallán demostró su gran carácter y cumplió con creces tanto en tareas defensivas como ofensivas, pues fue un quebradero de cabeza para el delantero Iago Aspas. Además, anotó un gol decisivo para el triunfo del equipo vitoriano.