El fallecimiento de Diego Armando Maradona deja ahora, tras el luto, muchas preguntas en el aire. Cuestiones a las que se quiso referir Rodolfo Baqué, abogado de Diana, enfermera que atendió al 'Pelusa' tras salir del hospital.
"Maradona echó la culpa a la enfermera porque era un impedimento para consumir. Ella no le podía ni dar la medicación. Solo hacía lo que el médico y la psiquiatra le decían", aseguró Baqué ante los medios.
Además, recordó que el argentino nunca fue una persona fácil de tratar desde el punto de vista médico: "Diego era un paciente adicto, pero solo tomaba pastillas por la prescripción psiquiátrica. Eso le aceleró el corazón. Fue sometido a un esfuerzo extra y no hubo control con eso".
"Su corazón podría haber seguido funcionando, pero fue forzado por la medicación y no fue atendido por ello. Hubo una imprudencia o una negligencia", recalcó Baqué.
"Diego tenía una casa propia donde ir tras salir del hospital. Donde fue no era lo correcto. En cualquier casa de uno de vosotros, hubiese seguido vivo. Los médicos no hicieron nada, no llamaron a nadie cuando le subieron las pulsaciones. Y los responsables son los médicos que lo trataron: Luque y la psiquiatra. Si Maradona quería una aspirina, pasaba por ello", sorprendió.