La Segunda División contó durante varias temporadas con el Badajoz. Marcelo Tinelli es ahora el presidente de San Lorenzo, pero en el pasado pudo formar un equipo que pudo ser recordado en el fútbol español. Su apuesta, finalmente, quedó en nada mucho menos de lo prometido.
En verano de 1998 compró el club extremeño con el objetivo de ascender a Primera División. Una idea que quería asegurar con el fichaje de Diego Armando Maradona, por entonces ya retirado oficialmente. Pero el 'Pelusa' pensó seriamente esta posibilidad. Así lo publicó 'El País' entonces, como ahora recuerda 'AS'.
Fue entonces cuando comenzaron a aparecer otros nombres: Mauricio López, Basualdo, Pedro González, Caniggia... y hasta Romario. Tal era el 'hype' por el Badajoz que en Argentina se llegaron a vender muchísimas camisetas del club.
La entidad llegó a los 5.600 abonados, un récord histórico más fácil de alcanzar con los rumores que rodeaban al club. "Maradona arregló las diferencias que tenía con Tinelli y ahora todo es posible", dijo Guillermo Coppola, por entonces representante de Maradona.
Pero el 'Pelusa' nunca firmó con el Badajoz. Tampoco Romario, Basualdo o Pedro González. Fue el inicio del declive del proyecto que quedó a los mandos de un poco contrastado Toti Iglesias.
Tres años después y al ver casi imposible el sueño del ascenso, Tinelli abandonó el Badajoz y cedió los poderes del club a Javier Tebas, ahora presidente de LaLiga, para que vendiese de forma definitiva a Antonio Barradas, empresario portugués.
Un año después, el Badajoz descendió a Segunda B y, en 2012, confirmó su desaparición. Poco después llegó la refundación. Ahora trata de resurgir y tomar de nuevo esa plaza en la división de plata del fútbol español, pero antes tiene licencia para soñar en la Copa del Rey ante el Eibar.