Pues, según el propio colegiado, el delantero italiano le insultó, pero, para ello no usó el francés ni su idioma materna, sino el inglés que aprendió durante su etapa en el Manchester City.
"Me insultó en inglés. No diré nada más ni justo lo que me dijo, pero utilizó una frase bastante típica", expresó el árbitro poco después de que terminara el partido.
Así pues, parece que Balotelli no olvida esa etapa en la que perdió totalmente la cabeza. Manchester fue la ciudad que le terminó de etiquetar como un futbolista loco... y ahora eso cobra aún más sentido.