"Me siento muy feliz aquí, me alegro de ser un jugador de Bayern. Me encantaría ser la cara del Bayern, he jugado un papel muy importante (para el club) en los dos primeros años y quiero incluso jugar una parte mayor", comentó el mediapunta alemán a un periódico de su país.
El jugador es consciente de que ha disputado muchos menos minutos de lo deseado, y sabe bien la razón. "Cometí mis propios errores pero también he tenido que soportar una gran cantidad de cosas que se han torcido. Los dos últimos años han sido con certeza como un proceso de maduración para mí", dijo Götze.
Se le preguntó por los rumores de un cambio de aires este pasado verano, a lo que contestó que "nunca traté con el traspaso, es muy posible que otros clubes tenían interés pero yo no tenía interés en dejar el Bayern".
Su anterior traspaso, del Borussia Dortmund al Bayern de Munich, en el que milita ahora, fue muy sonado. Se le tachó de traidor, de "pesetero". Götze lo sabe, y comentó que "la gente probablemente pensó que firmaba con el Bayern sólo por el dinero". "Hoy sé, al principio de los entrenamientos de pretemporada en Munich que debería haber explicado aquel traspaso. Debería haber declarado mis razones deportivas para poner fin a todas las especulaciones. Todo habría terminado si hubiera hecho eso, pero no lo he hecho y he dejado lugar a otras interpretaciones", añadió.