Marruecos buscó un choque ante un débil rival europeo para cargarse de moral para el Mundial y los norteafricanos no decepcionaron. Se impusieron con comodidad por 1-3 a Estonia y llegan al Mundial con un año entero sin conocer la derrota. Que Portugal y España se consideren avisados.
En el amistoso que ponía fin a la preparación marroquí, los de Renard ganaron con comodidad y llegaron a los 18 partidos sin ser derrotados. Los 'Leones del Atlas' se adelantaron pronto, en una jugada en la que Boussoufa llegó hasta línea de fondo y la puso para que Belhanda fusilara al guardameta estonio.
En un choque en el que actuaron Achraf y Amrabat como laterales, Marruecos haría el segundo en un fallo grave de Estonia, que acabó en penalti convertido por Ziyech.
La segunda parte, en la que en Marruecos entró En-Nesyri, no tuvo demasiada historia. El del Málaga, que llegó de rebote al Mundial, hizo el 0-3 en una buena jugada de los africanos culminada por el ariete a portería vacía e incluso pudo hacer más tantos de haber estado algo más acertado en el remate.
Purje, en los últimos instantes, maquilló el marcador en un choque que fue casi un monólogo marroquí. Los 'Leones del Atlas' confirman que llegan en su mejor momento a su vuelta mundialista.