Fue titular y descansó en la segunda parte. Tiene sentido, llevaba un par de días difíciles, con largos desplazamientos y un mal trago entre ambos. Sin él en el campo, el Southampton remontó, pero Ibra dio en el último suspiro el triunfo a los 'red devils'.
Cuando Rooney levantó la EFL Cup, el trofeo pasó por todas las manos. Las de Mata no lo presentaron a la afición, como sus compañeros.
Elevó la copa al cielo, visiblemente emocionado. Este triunfo era para su abuelo, recientemente fallecido. Se le veía un brillo especial en la mirada, que no se le quitó ni durante la celebración en el césped.
En el vestuario volvió a sonreir. La emoción del momento había pasado. No era hora de seguir triste. Había que celebrar un nuevo título del Manchester United.
What a lovely pic of Juan Mata with the EFL Cup pic.twitter.com/hUWii7Wu8Z
— Fiona May (@fionamay4471) 26 de febrero de 2017