El ex presidente del Barcelona Sandro Rosell ha sacado a la venta un libro llamado 'Un fuerte abrazo' en el que narra sus asi dos años en prisión preventiva antes de salir absuelto.
Por eso, en el programa 'El Món', de 'RAC 1', Rosell quiso hablar del contenido del libro, presentándolo a todos los oyentes: "Cuando estás en libertad, lo consideras normal, al menos antes de la pandemia, pero en la cárcel es algo muy exclusivo. Hay que abrazar todo lo que podamos el día que se pueda".
Cuestionado sobre si se volverá a presentar a la presidencia del Barça, comentó: "No pasará. Las segundas partes no se han de repetir. Yo fue presidente del Barça en el momento que me votó la gente, lo recuerdo con mucho cariño, como una experiencia vital, que la llevaré conmigo la resta de mis días, pero no está en mis planes presentarme. Le prometí a mi madre que mientras que esté viva no lo haría, y espero que viva muchos años. Casi absolutamente puedo decir que no".
Además, comentó sobre los motivos que le llevaron a prisión: "Alguien influyó en un fiscal para que iniciara estas investigaciones y se me pasaron muchos nombres por la cabeza. Para mí es fundamental descubrir quien está detrás. Sobre Jaume Roures no tengo pruebas y no le señalaré sin pruebas, pero la diferencia está clara. Al principio Mediapro y yo íbamos en el mismo caso y yo me paso dos años en prisión preventiva y acabo saliendo inocente mientras que Mediapro se declara culpable y no les pasa nada".
"Mi relación era buena con Florentino y no hemos hablado más, pero sé que llamó a un amigo común para interesarse por mi situación. También he hablado con Laporta, me llamó y muy bien con él. Y me sorprendió porque ya le confesé que yo a él no le hubiera llamado en la misma situación. Me alegró hablar con él", prosiguió.
"La juez Lamela ha hecho llorar a mi madre y eso no lo perdono"
Y añadió: "Estoy tranquilo y con ganas de saber qué pasó. A la juez Lamela no le guardo rencor, me ha hecho mucho daño, pero rencor no es la palabra. Lo que quiero saber es porque tomó esas decisiones tan mal tomadas. Pero ha hecho llorar a mi madre y eso no lo perdono".
"Espero que me ayuden los medios para seguir esta causa. Presenté la querella hace cuatro mesos y ahora está parada. Yo confío en algunas personas de la justicia. Es cuestión de suerte, pero no niego que se me hace muy difícil confiar en la justicia, especialmente después de que me negaran más de diez veces la libertad bajo fianza. La conclusión es la presunción de inocencia no existe", sentenció.