"No he encajado como hubiese querido. Me tengo que adaptar porque es muy difícil cambiarlos a ellos", señaló el ex de Boca, Juventus o City en 'Movistar'.
El jugador del Shanghai Shenhua agradece la vida que puede tener fuera de los terrenos de juego, pero reconoce que China no brilla por su calidad futbolística.
"Son muy inocentes. No tienen una ténica de nacimiento como tienen en Sudamérica o Europa. Pueden mejorar con la regla del gobierno que obliga a los niños a jugar desde pequeños", señaló.
Y dejó un claro mensaje: "Aunque traigan al mejor del mundo, la Liga China no puede acercarse al nivel de las de Europa".