"He decidido dar la cara porque debía hacerlo para decir que mi decisión es meramente deportiva y futbolística", explicó el jugador.
"Siempre estaré agradecido y lo fácil hubiera sido quedarme porque ésta es mi casa. Es complicado decir que me voy, pero quiero seguir jugando al máximo nivel", añadió, nervioso.
Meré dijo aceptar, sin reprocharle nada a nadie, todo lo que se haya dicho o se pueda decir sobre su decisión. "Espero que la gente pueda entender", dijo en varias ocasiones.
"Quiero mucho al Sporting y lo que no quería era dejarlo en Segunda", afirmó el futbolista, que tiene una cláusula de rescisión de 15 millones.
El destino que más ha sonado siempre para Meré ha sido el Málaga, pero el jugador ha querido dejar claro que tiene más ofertas de España y del extranjero.
"Siempre he dicho que, si me tenía que ir, debía ser dejando la mayor cantidad de dinero posible para el club", afirmó el central, que desveló que hubo negociaciones para un posible traspaso, pero que el Sporting no había aceptado.