"No fue un partido duro ni mucho menos como he leído, no fue al límite. Hubo tres faltas seguidas, eso sí, pero no fueron duras. Messi es noble, aguanta bien todo. Nunca tiene malas palabras y no sé por qué no me dio la mano", explicó.
Balenziaga volvió a ser la pareja de baile de la estrella azulgrana y, esta vez, hizo que San Mamés no se encontrara con la mejor versión del argentino. El defensa vasco restó importancia al gesto final del '10' del Barça.
Aparte, el carrilero rojiblanco reconoce que ha perdido cantidad de minutos por la llegada de Yuri Berchiche, pero declara que se siente "igual de importante tenga el rol que tenga".
Balenziaga ve al Athletic "compitiendo a gran nivel" en las últimas jornadas, razonando la derrota ante la Real Sociedad con "un mal día". Ahora solo piensa en el Huesca, su próximo rival, un partido que cree que será complicado. "Ellos se juegan muchísimo. Si ganan se acercan a la salvación. Para nosotros también son tres puntos importantísimos", concluyó.