Ahora mismo, Messi está tranquilo y parece no afectarle ni su lesión, ni la citación por el presunto fraude de 4'1 millones de euros.
Según varios juristas, lo más probable es que el juicio a Messi y su padre se celebrará en abril y mayo, meses en los que tendrán lugar las jornadas determinantes de Champions y Liga.
Será entonces cuando veremos si Messi sigue tranquilo o si, por el contrario, la situación le afectará en un momento clave de la temporada.
Al argentino no le piden pena de cárcel (se le solicitan 22 meses, pero al no tener antecedentes en ningún caso irá a prisión) y el juzgado programará el juicio teniendo en cuenta las circunstancias profesionales del acusado.
Es habitual, en este tipo de juicios, que las sesiones se adapten a las obligaciones de los asistentes, ya sean acusados o abogados.
Messi podría haber evitado ir a juicio si hubiera llegado a un pacto con la Agencia Tributaria. Martell, el abogado que representó al jugador al inicio del caso, veía inevitable que el argentino llegase a juicio y prefería pactar con Hacienda.
El delantero azulgrana abonó las cuotas y los intereses que le reclamaban solventando la demanda civil. Esto provocó que en la opinión pública calara la duda, ya que los detractores y algunos aficionados defendían que si no fuese culpable, no habría abonado el dinero.
No sirvió para nada pagar ese precio, tanto el dinero como el de la duda. Otros letrados convencieron a Messi de que el juicio podría evitarse si adoptaban otra estrategia, pero no fue así.