En una entrevista para 'Planet Health', el centrocampista del conjunto londinense hizo un repaso a su aportación en la asociación 'Make-A-Wish', cuyo objetivo es cumplir los sueños de los niños enfermos.
"Cuando era niño, ser futbolista era más una pasión que un sueño. Claro que cuando jugamos, soñamos con ganar el partido o los torneos. Pero era más un placer, y todavía lo es", confesó Hazard.
El belga lo tiene claro en la edad de formación: "De pequeño no tienes que pensar en jugar a nivel profesional; solo estar con tus amigos y pasarlo bien. Solo hace falta un balón. Por eso mis hermanos y yo jugábamos a todas horas. Cogíamos una pelota, y al jardín".
Así, Hazard fue claro sobre cuál es su objetivo. "Los sueños son los que te permiten avanzar. El mío personal es convertirme en el mejor futbolista del mundo. Para eso juego y me entreno", explicó.
"Es lo que hace posible que avances y te anima a trabajar hacia un objetivo. Para un niño, tener un objetivo es estimulante, te hace querer luchar y trabajar para cumplirlo algún día", añadió Hazard.
El belga quiso darle un consejo a todos los niños que sueñan con alcanzar el estrellato. "Desafortunadamente no hay sitio para todos y no es fácil abrirse paso. El único consejor que puedo darles es que se diviertan en el campo y que no piensen en llegar a profesionales", finalizó.
Hazard es el hombre soñado por el Real Madrid para la próxima temporada. De hecho, el belga podría ser anunciado como nuevo jugador blanco tras la final de la Europa League.