"No fue tan difícil elegir al Brescia. Desde el momento en el que se me planteó fichar por el Brescia, no pensé en nada más. Es mi ciudad, me puede dar todo. Y yo puedo darle todo a esta ciudad", afirmó Balotelli en su rueda de prensa de presentación.
"No tengo nada de miedo. Los objetivos son hacer crecer este equipo, tener el apoyo de mi equipo. Miedo de que falle me parece que tenéis más vosotros (la prensa) que yo", prosiguió el delantero italiano, ex jugador de Lumezzane, Inter, Milan, Manchester City, Liverpool, Niza y Marsella.
En una sala de prensa repleta y con cientos de aficionados esperándole en las afueras del hotel en el que se organizó el evento, Balotelli expresó su alegría por volver a Brescia, la ciudad en la que se formó en su juventud.
El nuevo número 45 del cuadro norteño se mostró calmado y sereno, decidido a ayudar a su equipo sin prestar atención a los que le critican a priori.
"No suelo leer mucho, aunque sí a veces me señalan que se me critica en la prensa. Estoy acostumbrado. No puedes gustar a todos, es normal", reflexionó.
'SuperMario', como es apodado en Italia, reconoció que su objetivo es "absolutamente ir a la Eurocopa" y que el seleccionador italiano, Roberto Mancini, le llamó recientemente para felicitarle por su cumpleaños.
También admitió que su madre "lloró" cuando supo que regresaría a Brescia y que estaba contentísima por volver a tenerle cerca.
Al acabar la rueda de prensa, que no duró más de quince minutos, Balotelli se tomó una foto con el presidente del Brescia, Massimo Cellino, y exhibió la camiseta número 45, con la que podrá debutar en la nueva Serie A a partir de la quinta jornada.
De hecho, el delantero debe cumplir cuatro jornadas de sanción por una roja directa recibida el año pasado en la Ligue 1 cuando vestía la camiseta del Marsella. Su estreno podría producirse el 25 de septiembre contra la Juventus.