"Lo dejé en el momento oportuno y no me arrepiento. La cabeza me pedía parar y la situación del Málaga no era buena, sentía que tenía que cerrar un ciclo y no me apetecía vivir otra experiencia fuera del club", comenzó el que fuera defensa del equipo malagueño.
Estuvo en La Rosaleda durante cinco temporadas y en la 18-19 solo jugó 22 minutos hasta que decidió colgar las botas para siempre.
"Tengo una vida más ordenada, practico otros deportes, me alimento mejor... Veo el fútbol que toca y el que me apetece, aunque echo de menos el estadio y jugar ante tanta gente, eso no se olvida", continuó.
Miguel Torres cree que se encuentra en uno de los momentos más importantes de su vida: "Hay gente todos los días en la puerta de casa y es complicado que tenga privacidad en mi vida, pero hay que saber aceptarlo. Yo no cambiaría nada y estoy en la mejor etapa de mi vida".
Para terminar, el ex jugador de otros clubes como Getafe y Real Madrid valoró la situación que vive el Málaga, en el que permaneció durante más tiempo: "Estoy triste y preocupado. Es una situación dramática y no se sabe cómo resolver. Se veía venir desde hace muchos años".