Llegaba con numerosas bajas y con una nefasta estadística reciente en el Bernabéu el Athletic de Bilbao y prolongó su mal fario en el campo 'merengue' con una nueva derrota, esta vez inmerecida, después de un choque en el que los bilbaínos plantaron cara y merecieron al menos el empate.
Salieron mejor los de Valverde, ajenos a su nueva derrota en Europa y a las ausencias de varios titulares, y dispusieron de un par de ocasiones para adelantarse en el marcador, sofocadas por un Keylor Navas que estuvo muy seguro durante todo el encuentro.
Pero, pronto, el Real Madrid veía cómo el partido se le ponía de cara gracias a un tanto de Benzema. Saborit falló al despejar un balón largo hacia Isco y el malagueño, de lo mejor del Real Madrid esta noche, le regaló el tanto al galo, que esperaba atentamente en el área pequeña para abrir el marcador.
Aprovechó ese tanto el equipo de Zidane y lo transformó en un dominio abrumador en la primera parte del choque, que sin embargo no le permitió nada más que sacar un buen puñado de córners, pues apenas se vio a Gorka en toda la primera mitad.
Entre ocasión y ocasión malgastada por un paupérrimo Cristiano, el Athletic avisó con un remate de cabeza muy claro de Sabin que se fue por encima del larguero y el propio canterano rojiblanco haría el empate poco después, tras una jugada de Eraso dentro del área que contó con clamorosos errores defensivos de la zaga local.
Los 'leones' se vinieron arriba tras el 1-1 y la última parte de la primera mitad fue suya, disponiendo incluso de un contragolpe peligrosísimo -atacaban 4, defendían 2- que acabó malgastado por Eraso y mal culminado por Sabin.
Más y más ocasiones de Cristiano.
Tras el descanso, el Real Madrid retomó el mando casi por inercia, pues no fue hasta los últimos 20 minutos cuando los de Zidane crearon peligro de verdad.
De hecho, fue Iñaki Williams el que perdonó el 1-2 tras quedarse solo ante Keylor Navas en un error de Varane con un remate que salió por encima del larguero.
Zidane quitó a Isco y metió a Lucas Vázquez para buscar amplitud por banda y el equipo blanco comenzó a acumular ocasiones, fundamentalmente en las botas de un Cristiano que incluso despertó los pitos del público blanco tras acumular fallo tras fallo.
El tanto no llegaba y tuvo que ser Morata, que acababa de entrar por Benzema, el que con un doble remate pudo batir a Gorka para hacer el 2-1. El canterano aprovechó un gran centro de Lucas Vázquez para demostrar que Zidane había acertado a la perfección con los cambios.
Con 2-1 y ante un rival cansadísimo, se esperaba un triunfo cómodo del Madrid, pero un nuevo error de Varane dejó solo a Williams ante Keylor en una ocasión inmejorable que no fue aprovechada por el 'león' de manera inexplicable.
Ya en el descuento, Cristiano se quedó completamente solo ante Gorka, pero en lugar de regalarle el segundo tanto a Morata, que le acompañaba por la izquierda, quiso coronarse con el tanto definitivo, estrellando su remate en el portero bilbaíno e indignando a sus compañeros y a la grada con una decisión plena de egoísmo y falta de compañerismo.
Lidera la Liga el Real Madrid con esta victoria, aunque no con la soltura esperada, en tanto que el Athletic sale reforzado de un choque en el que mereció algo más.