En el día de su 94 cumpleaños, América de Cali no podía seguir sin sumar una victoria en el Apertura. Como en las mejores películas románticas, el final acompañó a la narrativa.
Los de Juan Cruz Real llegaron al estadio La Independencia para enfrentarse al colista de la competición, Boyacá Chicó, que aterrizó en el choque sin conocer el triunfo.
En una primera parte en la que el cuadro local fue dueño y señor de la posesión, los 'escarlatas' vieron cómo su tridente ofensivo abrió la lata al contragolpe.
Adrián Ramos, que volvió a la titularidad casi dos meses después, aprovechó la altura de la defensa rival para filtrar un gran pase en profundidad a Moreno. Este vio a Vergara llegar veloz al punto de penalti y le puso el pase de la muerte para que el '11' solo la empujase.
Un tanto que no noqueó a los 'ajedrezados', que siguieron fieles a su estilo de juego, pero la diana del empate llegó de la forma menos combinativa. Javier Calle aprovechó un despiste de la defensa visitante para armar un trallazo desde la frontal y mandar el balón a la escuadra de la portería defendida por Graterol.
Con el 1-1 ambos equipos se marcharon a vestuarios. Al comienzo de la segunda mitad, el colista de la tabla volvió a imponerse en el control de la pelota a la 'Mechita', que siguió atrás a la espera de salir con la caballería. En el 60', otra vez Moreno, que sumó así su segunda asistencia de la noche, le puso un caramelo a Cabrera dentro del área y el centrocampista no falló para colocar el 1-2.
Esta diana encajada sí afectó anímicamente a Chicó, que además sintió impotencia ante Graterol, que se encuentra en un estado de forma óptimo. El meta realizó dos salvadas, en el 76' y 83', a bocajarro y esto evitó que el empate no subiese al electrónico. Con esta actuación, Don Joel encadena una serie de compromisos en los que consigue los males de su equipo no vayan a peor.
En unos últimos minutos de infarto, el América tuvo la suerte del campeón y logró aferrarse a su renta. Selló los tres puntos y consiguió así el mejor regalo posible para su aniversario, en el que Moreno trajo espectáculo y Graterol, oxígeno.