En su sentencia, que ha sido dada a conocer este martes, la magistrada absuelve a los tres miembros del consejo de administración, que también iban a ser destituidos en la junta.
La juez considera probado que Lavín desconvocó la junta para impedir que tanto el administrador concursal de la compañía que entonces era accionista mayoritaria del club, como la Asociación de Peñas Racinguistas y el resto de los accionistas minoritarios pudieran participar en ella y "ejercer sus derechos sociales más básicos".
Señala además que la decisión de desconvocarla solo consta en "una mera nota de prensa", suscrita por el propio Lavín, y fue comunicada a los demás consejeros telefónicamente.
La magistrada considera que Lavín decidió desconvocar la junta porque supo que el administrador concursal de la compañía propietaria de la sociedad que se había convertido en accionista mayoritaria del Racing iba a asistir y le había manifestado su intención de cesar al consejo de administración.
Por tanto, la desconvocó "con el fin de impedir" tanto al administrador concursal, como a la Asociación de Peñas Racinguistas y al resto de pequeños accionistas de la sociedad "participar en la junta y ejercer sus derechos sociales más básicos".
Según la sentencia, la desconvocatoria supone una "abierta conculcación y obstaculización del ejercicio del derecho de los accionistas a conformar la voluntad social de la junta", con "ejercicio abusivo" del cargo, "impidiendo su expresión en la junta, al suspenderla".