Aunque los hechos ocurrieron en el campo del Alaró, Competición ha decidido también el cierre por lo que resta de temporada del campo del Collerense.
La Comisión Antiviolencia de la FFIB decidió también tras lo sucedido enviar el vídeo a la Fiscalía y presentar denuncias por vía penal. La Guardia Civil de Inca también está investigando las denuncias presentadas por los progenitores.