"En el club estamos todos tensionados porque ante el Villarreal B nos jugamos la vida y el futuro del club. Es el partido más importante de las últimas temporadas", dijo García, quien señaló que en todos los estamentos de la entidad "se respeta mucho" al filial.
"El resultado de la ida es bueno (2-0), pero ellos son peligrosos y ya lo demostraron en Elche. Cualquier accidente en los primeros minutos puede equilibrar de nuevo la eliminatoria. No hay nada hecho", añadió el presidente.
García mostró una gran confianza en la trayectoria de su equipo, invicto en los últimos 16 partidos, pero alertó de que el Villarreal B es un equipo "que es capaz de todo y que también tiene muchas opciones de ascender".
"Todos estamos con las orejas tiesas porque es un gran rival y la ventaja no es, ni mucho menos, definitiva", explicó a EFE el dirigente del Elche, quien no quiso especular con los posibles actos programados en el caso de un ascenso.
"Aquí nadie piensa en otra cosa que no sea el partido. Los dirigentes, los técnicos y los jugadores saben que hay mucho en juego. No podemos pensar en otra cosa. Si al final se logra el objetivo, ya se preparará todo lo que haga falta", sentenció.