Abrió Álvaro Negredo el marcador a los 14 minutos de partido, sólo para ser igualado tres más tarde por su compatriota y hoy rival Roberto Soldado.
El partido se fue calentando, lo esperado en un derbi estambulita, máxime cuando hay tanto en juego. Cuando Potuk vio la segunda amarilla en el minuto 44 todo se descontroló.
Özbayrakli anotó el segundo para el Fenerbahçe, al tiempo que Medel y Demirel veían sendas amarillas. Se fue el partido al descanso con los locales debiendo remontar un 1-2 con un hombre más.
No parecía una misión imposible, hasta que a Quaresma, quien había entrado al descanso, se le cruzaron los cables y vio la roja directa.
El partido se descontroló del todo, y en el 77' tocó techo. Demirel, portero del Fenerbahçe, vio la segunda amarilla y dejó a los suyos con 9. Por suerte, le restaba un cambio, y entró Kameni por Chahechoue.
Con el Besiktas de nuevo en superioridad, y volcado en busca del empate, éste llegó de la forma más inesperada, mediante un autogol de Kaldirim.
El Fenerbahçe se lleva un empate muy valioso para la vuelta, aunque quizá haya pagado un precio demasiado elevado en forma de bajas por sanción.