El delantero, la gran referencia ofensiva de Brasil, había buscado continuamente el gol durante todo el partido, pero la mala suerte le estaba castigando. El marcador iba 0-0 y conforme avanzaban los minutos, los nervios fueron dejándole en un estado continuo de tensión.
Como acostumbran a hacer, los rivales fueron bastante duros con él y le frenaron a base de faltas. En una de ellas, cometida por Duarte, el delantero explotó y se encaró con el jugador 'tico', dejándole un recado algo feo.
Las cámaras de televisión captaron a Neymar profiriendo insultos hacia su rival. De su boca se leyó un claro 'filho da pu**'. La razón del insulto habría sido que el jugador de Costa Rica le habría recriminado que se había tirado y no debería haberse pitado falta.
Neymar continuó sumido en una tensión gigante, que se personificó en el llanto que dejó sobre el césped nada más terminar el partido.