Al Eintracht le costó encontrarle las cosquillas al Augsburgo. Eso sí, cuando lo consiguió no paró.
El primer gol tardó en llegar. Ambos equipos lo intentaron en la primera mitad, a ambos les faltó suerte de cara a portería.
Cuando todo parecía indicar que el choque se iría al descanso con un 0-0, apareció Chandler. Kohr vio venir a su compañero y le cedió el pase. El jugador la puso al palo corto y fusiló al meta del Augsburgo.
Más tranquilo, el Eintracht se fue al descanso. A la vuelta, al Augsburgo le esperaba un auténtico torbellino.
De nuevo Chandler apareció, esta vez se alió con Kostic y firmó el 2-0 tres minutos después de que se relanzara el partido. En el 55', llegó André Silva. Mención especial de nuevo a Kostic, que se puso su mejor traje de asistente para ponerle en bandeja el tercero al '33'.
Y no contento con su show de asistencias, Kostic decidió que no iba a irse de allí sin marcar... por partida doble. En apenas dos minutos (89' y 90'), se encargó de dejar el partido sentenciado.
Manita del Eintracht con un doblete al cuadrado, uno de Chandler y otro de Kostic. El serbio brilló y, además de marcar por partida doble, se encargó de regalar dos asistencias. Puro espectáculo.
Con los tres puntos, el Eintracht sube a la novena plaza y acumula 28 unidades. Ya son cuatro las jornadas que lleva sin caer el equipo de Frankfurt.
El Augsburgo, por su parte, cae a la undécima plaza con sus 26 puntos. Una dura derrota que deben dirigir los de Schmidt.