Santiago Hernán Solari comienza a experimentar los primeros problemas que sufre un entrenador del Madrid. Los internacionales se marcharon con sus respectivas selecciones y el argentino tendrá que prestar más atención de lo normal a los que se marcharon de la ciudad con molestias.
Varane y Bale son los que tienen en vilo al técnico. El primero ni siquiera entró en la convocatoria para el partido ante el Celta en el estadio de Balaídos y el técnico 'merengue' decidió reservarle para que sus dolores no fueran a más. Sin embargo, Didier Deschamps no solo decidió convocarle sino que jugó los 90 minutos del partido de la Selección Francesa ante Holanda.
Un duelo duro en el que el central de los blancos tuvo que emplearse a fondo para intentar frenar las acometidas de la 'Oranje', que acabó imponiéndose y relegó a la Alemania de Joachim Löw a la Liga B de la Liga de Naciones.
El caso de Bale es algo similar. El atacante se retiró del partido en tierras gallegas tocado por un golpe en su tobillo, pero el 'expreso de Gales' fue titular en el partido de su selección frente a Dinamarca, que consiguió su ascenso de categoría.
El delantero del Madrid consiguió anotar el gol del honor del combinado galés. Sus molestias parecen que remitieron y pudo disputar un nuevo compromiso internacional. Volvió a ver puerta, aunque no con los 'merengues', con los que ya acumula ocho partidos consecutivos sin marcar.
Gales se medirá en un amistoso ante Albania en el partido que les resta de este parón, mientras que Francia se enfrentará a Uruguay en otro duelo sin nada en juego. Dos partidos en los que Bale y Varane podrían recibir el esperado descanso.
Dos vertientes abiertas que Solari no podrá dar por terminada hasta que ambos cierren el parón de selecciones. El 'virus FIFA' acecha en Chamartín y el técnico argentino tendrá que lidiar con ello, algo prácticamente nuevo para él.