En este sentido, el jugador ha reconocido que dada la "predisposición ofensiva del equipo", cualquier "mínimo error en la salida de la pelota" le perjudica mucho, sobre todo en "los inicios del partido".
Por el contrario, ha añadido, "estamos llegando arriba" y generando multitud de ocasiones, por lo que el trabajo ahora pasa por "ser más agresivos en las dos áreas".
Con todo, el equipo tendrá la oportunidad de resarcirse de los malos resultados el próximo miércoles frente a Osasuna, que visitará Anduva para jugarse la segunda eliminatoria de la Copa del Rey, un torneo que "ilusiona" y supone una "motivación extra" para el Mirandés.
Esa será la tercera vez que ambos equipos se vean las caras en apenas un mes y las dos anteriores se saldaron con victoria navarra. Sin embargo, la Copa es diferente y cualquier resultado es posible.
"No sabemos qué intenciones tiene Osasuna en la Copa. No sé si se parecerá al partido de hace diez días" o no, pero sí "sabemos lo que tenemos que hacer nosotros", ha asegurado García.
Lo que está claro es que el Mirandés afronta la semana con "ganas", no sólo por el partido frente al conjunto navarro, sino por la visita a Mendizorroza del próximo sábado, un "derbi" siempre "especial" con el que el equipo rojillo confía en comenzar a despegar en la Liga.