El futbolista del Real Madrid está pasando varios días de sus vacaciones en su Donostia natal y ha aprovechado para explotar al máximo una de sus grandes pasiones: los caballos.
Y es que Odriozola se pasó por el hipódromo de la ciudad vasca para ver competir a uno de sus caballos, 'El ingrato'.
Sin embargo, la presencia del joven lateral blanco no pudo ser sinónimo de victoria para el animal y su jockey, C.A. Loaiza.
'El ingrato' finalizó en la cuarta posición en el 'Premio Hipodromoa Turf', la carrera más importante de este miércoles en el recinto donostiarra.