El futbolista alemán ha tomado esta decisión después de que la polémica y su enfrentamiento con la DFB no cesasen. Özil, en una carta abierta publicada en tres tomos, con tres destinatarios distintos, ha decidido no acudir más a las llamadas de la Selección.
Todo comenzó con su polémica foto con Erdogan. El presidente de Turquía se fotografió con el propio Özil y su compatriota Gündogan, una escena que causó gran revuelo por la tensión política existente entre Alemania y Turquía a raíz del conflicto sirio.
Se llegó a pedir su exclusión de la lista para disputar el Mundial, y Löw le pidió que compareciera públicamente para explicarse. Nada de eso ocurrió y la polémica siguió creciendo, y creciendo, y creciendo...
Hasta que el futbolista dijo 'basta'. Özil ha decidido cortar por lo sano, y en un amplio comunicado, ha hecho oficial su decisión de abandonar la Selección Alemana.
22 de julio de 2018
Dicho comunicado se divide en tres partes. Cada una de ellas dedicada a un público concreto. En la primera, el futbolista trata de explicar el trasfondo de su polémica foto con Erdogan.
Özil asegura que lo hizo por respeto a la patria de sus ancestros, y que el encuentro junto a Gündogan no tuvo motivos políticos de ninguna clase.
22 de julio de 2018
La segunda parte está dirigida a la prensa, en especial a la alemana que aprovechó la foto para atacarle y alimentar el racismo y la xenofobia en su país.
El futbolista lamentó que ciertos medios le atacasen personalmente y culpasen a esa foto del pobre desempeño de Alemania en Rusia.
También denunció que sus patrocinadores le dieron la espalda tras la infame foto. Patrocinadores que Özil compartía con la Federación, una DFB que no movió un dedo por él en este caso.
22 de julio de 2018
Terminó su comunicado con un feroz, pero esperado, ataque a la propia Federación, a la que acusa de maltratarle, en especial su presidente, Reinhard Grindel.
Özil asegura en su carta abierta que en ningún momento le dejaron explicarse, y que Grindel trató por todos los medios de darle un componente político a lo que Özil únicamente vio como una muestra de respeto al país de sus padres.
El futbolista considera que la Federación le ha usado como chivo expiatorio, y lamentó todos los insultos e improperios recibidos por parte de la clase política germana.
Por esas razones, pero principalmente por el agravio recibido por parte de la Federación, Mesut Özil ha tomado la determinación de dejar la Selección, al menos mientras el ambiente siga siendo, a su juicio, racista e irrespetuoso.