"Si hubiese sabido que esto iba a pasar, me hubiese ido a Estados Unidos", confesó el futbolista a la prensa local. A sus 36 años, Ivica Olic empieza a valorar la posibilidad de militar en una liga menos exigente que la alemana, pero en la que no tenga que renunciar a su sueldo.
Pero considera que aún tiene fútbol en sus botas, con lo que no se cierrra la puerta a seguir en Alemania. "Yo sé que todavía puedo jugar al máximo nivel, pero si mi situación no cambia en las próximas cuatro o cinco semanas, tendré que buscar un cambio", aseguró. Y remató asegurando que puede ser que cambie de aires, o quizá no. "Quizá vaya a Estados Unidos o quizá vaya a otro liga. También hay una posibilidad de que me quede en la Bundesliga", dijo, para finalizar.