Dos equipos que luchaban por mejorar la imagen mostrada en el primer encuentro del Clausura. Once Caldas y Millonarios habían perdido en su estreno, por lo que necesitaban una victoria.
Y esta llegó del lado 'embajador'. Los de Bogotá y los de Manizales obsequiaron a El Campín con un partido vibrante, de ida y vuelta y que pudo decantarse de cualquier lado de la balanza.
Los dos equipos salieron con una clara vocación ofensiva, intentando adelantarse en el choque para poder vivir con tranquilidad el resto de los partidos.
La alegría iba a llegar pronto para Millonarios, aunque no fue precisamente por su buen hacer ofensivo. Junior Julio no midió bien un saque de banda y el balón acabó pasándole por encima.
Justo detrás de él, un Juan David Pérez que se las sabe todas, aprovechó el error para superar a Ortiz, que estuvo lento de reflejos y no salió a tapar el balón suelto.
Once Caldas intentaba resurgir de las profundidades. Sin embargo, cuando sus jugadores no marraban las ocasiones se encontraron con un inspirado Martínez, que suplió a Faríñez a un buen nivel.
Desde cerca, desde lejos, por las bandas o por el centro, Once Caldas siempre acababa aturullado en la zona de tres cuartos de ataque, mientras que Millonarios aguantaba sin muchos apuros y trataba de salir al contragolpe.
Llegó el descanso y, tras él, un mayor dominio si cabe de Once Caldas. Dominio del juego, que no del partido. Durante la mayoría de los segundos 45 minutos se jugó a lo que querían los 'embajadores'.
Los más destacable a favor de los de Manizales fue un gol anulado a Reina cuando restaban 20 minutos por fuera de juego. El resto del choque estuvo marcado por innumerables imprecisiones.
Finalmente, los tres puntos se quedaron en casa. Millonarios consiguió una victoria importantísima ante el que se supone que será uno de los rivales directos. Once Caldas, en cambio, se queda con dos derrotas en sendos encuentros.