No es la primera vez que vemos errores de bulto, de esos que enfadan a los aficionados, en la Liga Polaca.
En el partido entre el Górnik Zabrze y el Wisla Plock en el Ernesta Pohla, que acabó en tablas (1-1), vimos tres fallos seguidos.
Un central se equivocó en un pase, estando solo junto a otro compañero y un delantero rival, por lo que éste último se quedó solo ante el guardameta.
Cuando parecía que iba a ser gol, con el 0-1 en el marcador, el portero salió para adelantarse y hacerse con la pelota, pero cometió un error y el atacante disparó ya ante la presencia del defensa, que acudió a intentar enmendar su fallo y Ricardinho no mandó el balón a las redes.
Ya lo hizo antes, en el minuto 47, para poner en ventaja al Wisla Plock. Sin embargo, el Górnik Zabrze logró empatar en el 76' con un tanto de Igor Angulo.