Oyarzabal sacó pecho con la Real y no habló del Athletic

"Yo no quiero hablar de otras cosas, lo que me importa es que voy a estar en la Real", declaró tras entrenarse en Zubieta el futbolista eibarrés, que desveló que vivió "con tranquilidad" los días previos a una de las renovaciones más importantes que se han producido en la historia del club blanquiazul

El futbolista donostiarra, de 21 años, es una de las figuras jóvenes con mayor futuro de la Liga Española después de marcar la pasada temporada 14 goles y se ha convertido en un jugador muy cotizado y codiciado para equipos de mayor presupuesto que el realista, entre ellos un Athletic millonario tras el dinero recibido por Kepa Arrizabalaga del Chelsea, lo que hizo que esta cuestión planeara sobre su comparecencia.

Oyarzabal negó que su renovación se haya cerrado "de la noche a la mañana" porque el presidente de la Real, Jokin Aperribay, ya habló hace tiempo con él, aunque las "circunstancias han hecho que el proceso se haya acelerado".

Preguntado sobre esas circunstancias que hicieron que todo se produjera tan rápido, lo explicó con el argumento de que él estaba "convencido de lo que quería" desde el principio y el club también, por eso "se aceleró todo" y no por otro tipo de cuestiones.

Requerido directamente para que manifestara si el Athletic se había dirigido a él en los últimos días para abordar su contratación, se mantuvo firme en que no era el momento de hablar de lo ocurrido antes de la renovación, sino de la felicidad de seguir en el club: "Me lo ha dado todo desde que era pequeñito, por lo que estar más feliz es imposible".

No obstante, manifestó que ha recibido el apoyo de su familia y sus allegados "tomara la decisión que tomara".

Oyarzabal eludió aclarar si la Real le ha dejado una puerta abierta si en el futuro viene algún equipo grande de Europa para contratarle, porque su cláusula ha ascendido temporada a temporada, pasando de lo 30 a los 50 y ahora a los 75 millones, y subrayó que sólo quiere ser parte de "un proyecto ilusionante" con sus actuales compañeros.

Sobre si su deseo es desarrollar toda su carrera en la Real Sociedad como Xabi Prieto, el atacante eibarrés manifestó que lo que hizo el ex capitán donostiarra es "muy grande" y no habrá otro jugador igual, mientras que su propia historia "tal vez sea diferente".

Acepta haberse convertido, con sólo 21 años, en un referente para la cantera y para los niños de Gipuzkoa, muchos de los cuales lucen su nombre en sus camisetas de la Real.

"Esos niños ilusionados son una parte muy bonita del fútbol que muchas veces no apreciamos, hay que hacer un esfuerzo por nuestra parte, aunque a veces cueste", reflexionó.