A una semana del duelo ante el Real Madrid en la Champions League, el Manchester City tuvo este miércoles un nuevo susto.
El protagonista del mismo fue David Silva, santo y seña del cuadro mancuniano, que encogió el corazón a toda la afición durante la victoria ante el West Ham.
Y es que el futbolista canario se retiró en el tramo final del choque tras notar un pinchazo en su muslo izquierdo.
Silva, tras sentir las molestias, no quiso arriesgar lo más mínimo y fue sustituido de inmediato para desesperación de un Guardiola al que se le acumulan los problemas.
El City todavía no ha dado un parte oficial sobre el estado físico del futbolista, que es una nueva incógnita de cara al duelo continental en el Bernabéu.