"El sistema defensivo del West Ham no me daba ninguna alegría. Era muy complicado para mi expresarme en el campo. Trabajaba duro cada día sin llevarme ninguna alegría. Se podría decir que estaba enfadado", se sinceró.
"Estaba aburrido. Había contactado con el Marsella y su entrenador. Dije que solo quería irme al Marsella y me dijeron que no. Desde entonces, dije que no volvería a jugar con el West Ham", añadió sin tapujos.
Payet puso como ejemplo uno de sus últimos encuentros: "Contra el Hull City vencimos 1-0...y nos remataron cuatro veces al palo. Todos estaban felices en el equipo, pero ese día el hombre del partido fue el poste. No veía margen de mejora, al contrario".