Según informa 'ESPN', el delito del recogepelotas fue celebrar el gol de su equipo en los últimos minutos ante el que es su máximo rival. Eso le costó una paliza del jugador Jeferson Reis.
El futbolista perdió los papeles y asestó una paliza al joven de 19 años. Algo que estuvo a punto de desencadenar una batalla campal entre los futbolistas de ambos equipos.
Finalmente, la cordura se impuso y fueron los propios jugadores los que calmaron los ánimos. Reis se marchó obviamente expulsado del terreno de juego y escoltado tras la brutal agresión.
19 de febrero de 2018