Con 16 años y 207 días, Wilson batió el récord de Gareth Bale con Gales convirtiéndose en el futbolista del país más joven en debutar con la Selección. Casi nada. Una marca que no logra un cualquiera, ya lo sabía Coleman, seleccionador por entonces.
Años después, ya es un jugador potentísimo para una liga tan competitiva como la Premier. El Liverpool, club al que pertenece, ha sabido cocer su progresión a fuego lento. Como debe ser. Pasó media campaña como cedido en el Hull City antes de afrontar una etapa importantísima en el Derby County el curso pasado. En el Championship, con Frank Lampard a los mandos, Wilson firmó 18 goles y cinco asistencias en 49 partidos. Nada mal para un extremo.
Hizo la pretemporada con el Liverpool, pero finalmente el conjunto 'red' decidió que lo mejor era que tuviese minutos en un equipo de la categoría. Y ahí apareció el Bournemouth en su camino. Ya suma tres goles en seis partidos. Una de sus dianas fue ante el Manchester City con un lanzamiento de falta.
"Las faltas son algo que siempre he practicado desde diferentes posiciones. Cuando un partido se traba y no hay muchas ocasiones, un libre directo puede darte la victoria. Messi es el futbolista en el que siempre me he fijado, aunque él lanza con más rosca. Sus números de falta estos últimos años son increíbles", reseñó tras anotar a los de Pep, que por entonces calificó de "increíble" su tanto.
En el ultimo triunfo del Bournemouth, ante el Southampton, Wilson volvió a marcar. Ha llegado a la Premier para quedarse y en el Liverpool ya comienzan a frotarse las manos ante la llegada de un nuevo 'crack' que pueda hacer competencia al temible tridente formado por Salah, Firmino y Mané.
21 de septiembre de 2019