Pobre imagen de la Juventus, que dio síntomas de impotencia al no poder pasar del 0-0 ante el antepenúltimo clasificado, a pesar de contar sobre el escenario con estrellas de la talla de Dybala, Higuaín y Mandzukic.
Desde 1968, la entidad de Turín no visitaba al SPAL, un recién asecendido que sembró de dudas a la escuadra de Allegri, próximo rival del Real Madrid en los cuartos de final de la Champions League.
Lo peor del resultado para los visitantes fue que no fue injusto. El empate a nada fue el fiel reflejo de un encuentro donde la galaxia de la Juventus pasó inadvertida en la jornada de la Serie A.
A pesar de que llegaban con Higuaín en racha, 10 goles y tres asistencias en los últimos tres partidos, el SPAL apenas si sufrió alguna acometida de Dybala, que tímidamente se erigió como líder de su equipo.
Para colmo, Chiellini tuvo que abandonar el terreno de juego lesionado. El central italiano sufrió un problema muscular, aunque todavía se desconoce el alcance, a expensas de las pertinentes pruebas médicas.