Debutó Sarabia al frente del Andorra con una victoria en el campo del Espanyol, y bajo el escrutinio de su hoy jefe, pero hace no tanto discípulo, Gerard Piqué.
El Andorra resolvió el encuentro con dos goles en la segunda mitad. Abrió la cuenta Carlitos, en el 56', y Víctor Casadesús la cerró en el 73', con el gol de la tranquilidad.
El primer partido de Sarabia fue, por tanto, un cómodo triunfo. Victoria que presenció en las gradas quien hace no tanto era jugador suyo, y que ahora se ha convertido en su jefe: Gerard Piqué.
El central del Barcelona, quien sigue lesionado pero ya encara la recta final de su recuperación, asistió al encuentro que el club que posee a través de sus negocios extradeportivos disputó contra el filial de su más encarnado rival, el Espanyol.
El coronavirus demoró el debut de Sarabia hasta este miércoles, pero llegó con un triunfo bajo el brazo para el equipo del pequeño país del que todo el mundo habla últimamente.