El conjunto parisino fue muy superior, pese al buen encuentro de los canteranos merengue. Pero la defensa madridista fue un auténtico coladero de balones fáciles, un problema con la zaga que lleva años en el Real Madrid.
El PSG sólo necesitó dos minutos para abrir el marcador ante la cantada de todos los defensores y la impotencia de Kiko Casilla.
Todos esperaban un Madrid brillante y se encontraron con uno apagado y sin toque de balón. Algo con lo que Zidane tendrá que trabajar mucho de aquí al partido ante el Chelsea.
Coladero defensivo
Sin duda, la zaga fue el principal error del Real Madrid. Los jugadores parisinos entraban hasta la cocina ante las acciones inútiles de los defensas merengues.
Jugadores como Marcelo, Varane y Nacho, siempre firmes en defensa, fallaron una tras otra desde el primer gol.
Baja forma física
Y sí, tal como se lo contamos. Al Real Madrid le falta entrenamiento y rodaje, algo común de los primeros encuentros, pero que no justifica el excesivo cansancio de muchos de sus jugadores.
El PSG siempre llegaba un segundo antes a todos los balones, lo que propició que recuperaciones, balones divididos y centros al aire se decantaran siempre del lado francés.
¿Dónde está el ataque?
Se notó demasiado la ausencia de la BBC en el partido de anoche. El único gol merengue llegó en forma de penalti y las jugadas ofensivas brillaron por su ausencia.
Pero no hay que alarmarse. El de anoche fue el primer encuentro merengue en lo que va de pretemporada y sirvió para conocer los puntos a mejorar del Real Madrid.
Algunos pueden pensar que esos puntos son todos, pero no hay duda alguna de que Zidane cambiará la situación blanca para que ante el Chelsea podamos ver y disfrutar de un nuevo Real Madrid.