En plena tensión de un Marsella-Lyon, Mitroglou se erigió por encima de todos los defensas del conjunto visitante para amortiguar el centro y alojarlo al fondo de las mallas.
Payet se echó al equipo a la espalda, pero su conducción se topó con la zaga rival, con la fortuna de que el balón salió rebotado alto para que el griego hiciera valer su poderío.
Mitroglou puso patas arriba un Vélodrome que vio como el Olympique de Lyon había remontado el gol inicial de Rolando, gracias a un tanto de Rami en propia puerta y otro de Aouar.
18 de marzo de 2018