Stamford Bridge fue testigo del último partido del curso. El Chelsea recibió a los Wolves y se llevó una gran alegría. Se jugaban estar en la máxima competición europea y, finalmente, así será.
Mason Mount se encargó de encarrilar el partido a favor de los 'blues'. Tardó el gol en llegar. No fue hasta el minuto 44 cuando subió el 1-0 al marcador.
Fue un golazo tremendo. De falta directa, Masoun Mount la clavó. Ajustó el disparo todo lo que pudo y la puso en el sitio perfecto, imposible para Rui Patricio.
Y no se habían repuesto los Wolves cuando llegó el segundo. Giroud se encargó de dejar el partido visto para sentencia antes del descanso. Y fue gracias, precisamente a Mason Mount, quien le regaló una asistencia para que el galo se sumara a la fiesta de la Champions.
Porque, con esos tres puntos, los 'blues' se meten en la máxima competición europea para la 2020-21. Los Wolves, que quisieron pero no pudieron, se quedan sin Europa League... de momento.
La opción que les queda a los Wolves es que el Chelsea, su rival este domingo, gane la FA Cup. En ese caso, conseguirían su boleto para la Europa League. Su futuro en Europa, por tanto, está en mano de los 'blues'.
Hay que recordar también que los Wolves siguen en la Europa League este curso. De hecho, si la ganan, aún podrían ir incluso a la Champions. No está todo perdido.
El Chelsea acaba en la cuarta posición con 66 puntos, exactamente los mismos que el United, tercero. Por su parte, los Wolves terminan en la séptima plaza con 59, empatados con el Tottenham que es quien accede a la Europa League.