El equipo lombardo llegaba al choque con ganas tras el tropiezo en la primera fecha ante el Udinese. El reencuentro con San Siro debía estar a la altura y, aunque faltó algo de puntería, consiguieron lo más importante: los tres puntos.
El Milan , con André Silva como titular, planteó un partido con bastante iniciativa. Encontraron la posesión y solo sufrieron en los últimos metros ante un Brescia que se centro en los contragolpes y en defender con solidez. Fue un equipo que jugó bien sus armas, pero al que le faltó un plus para sacar algo positivo.
Çalhanoglu fue el gran protagonista al anotar, con un cabezazo inapelable a centro de Suso, el único gol del partido. El tanto llegó en el minuto 11, lo que llevó al Milan a prácticamente no sufrir... aunque sí a lamentarse por no encontrar más goles.
Las estadísticas del partido hablan por sí solas. El Milan tuvo el 63% de la posesión, ante el 37% del Brescia. Los 'rossoneri' dispararon un total de 11 veces (cinco a puerta), mientras que el Brescia solo ejecutó 5 remates (solo dos de ellos entre los dos palos).
Con este resultado, el Milan ya puede presumir de haber logrado sus tres primeros puntos. Nada más terminar el choque, los de Giampaolo se situaron en la décima posición (una por debajo del Brescia), aunque la clasificación cambiará bastante tras la disputa de los ocho partidos restantes.