A sus 35 años, Pandev vivirá una última jornada de infarto en la Liga Italiana. El Genoa debe pelear por salir de la quema para no quedar relegado a la Serie B. Una difícil papeleta de la que formará parte el delantero macedonio, que también estará atento a lo que pase en su país con el Akademija Pandev, el club que fundó y del que ahora es presidente.
Goran abandonó su país a los 17 años después de que el Inter se fijara en él cuando jugaba en el Belasica, el club de su ciudad. En 2010 y tras ganar el triplete con Mourinho, decidió crear su propio club ajeno al FK Belasica. En un inicio su idea era formar una academia, pero poco a poco la entidad fue ganando peso.
Finalmente, decidió entrar en Cuarta de Macedonia. En cuatro años, el Akademija Pandev se plantó en Primera. Tras una temporada de transición en la que logró la permanencia, en esta 2018-19 lucha por colarse en puestos de Europa League a falta de una jornada.
Pandev decidió crear este club para huir de la corrupción que se vivía en el Belasica, que acabó comprándolo un luchador de kick-boxing, Vaskov-Pinda. Ahora, el Akademija Pandev juega fuera de la ciudad después de que se elevara el alquiler del estadio, trasladando así su sede.
El equipo de Goran ya es el primero de la localidad y, salvo sorpresa, jugará en Europa el curso que viene. Aunque tendrá que afrontar primero las rondas previas de la competición. Y puede que lo haga con un Goran Pandev que, de descender a la Serie B, podría poner el broche a su carrera de la forma más poética posible.