"Salí un rato con unos amigos. Cuando regresé, Julián estaba en su casa, estaba tranquilo, con sus amigos también. Estuve en su casa un ratito, estábamos muy tomados todos y vino detrás de mí, estábamos bien y llegué a mi casa", comenzó el relató Palacios.
El jugador desmintió que maltratara a su mujer: "Mi señora sabía que me fui a tomar y estaba brava; estaba enojada porque no llegué a la hora que le había dicho, pero en ningún momento le pegué. Yo quería que él se fuera y él no quería, le dije varias veces que se fuera y de ahí empezamos a pelear".
Palacios reconoció que hirió a Quiñones en el forcejeo. "Eso fue como a las tres o cuatro de la mañana. Peleamos, le pegué con el puño y lo lastimé. Él, con todo el derecho de defenderse, buscó su cuchillo, me lastimó en la cabeza y después, en el forcejeo, él se cortó en los dedos, pero no fue como dice la gente de que él por defenderme y que yo lo corté", desveló para finalizar.
La directiva d Lobos tendrá que tomar nota al respecto para decidir qué hacer con sendos jugadores.