Qué pasará, no está nada claro. Por diversas circunstancias. El hijo de Mazinho sigue en el escaparate, de eso no hay duda, tampoco de que Marcelino lo quiere. Pero el Valencia piensa solo en una cesión, mientras que el Barça quiere sacar tajada de su marcha, unos 20 millones.
La cuestión es que el técnico 'che' insistió en la necesidad de su refuerzo tras el empate del estreno contra la Real Sociedad. "Lo que demuestra la actuación de Rafinha es que la parte deportiva del Valencia estamos en lo cierto", comentó Marcelino tras la buena actuación del jugador en San Mamés.
De hecho, su aparición en la segunda mitad ha despertado algunas dudas en el Camp Nou. ¿Suficientes como para que Valverde se quede al jugador en propiedad? No lo parece dado el 'overbooking' en la medular, aunque todo puede pasar.
Lo que sigue claro es que el Barcelona no lo regalará y no contempla la fórmula de la cesión que piden desde Mestalla. Que entre dinero fresco por Rodrigo desde el Atlético sí podría cambiar los planes.
Así que de aquí al cierre del mercado se avecinan muchos movimientos. Lo más plausible es que finalmente Rafinha deje de ser jugador azulgrana.